Conocemos La Tribu de Mimi, un proyecto educativo basado en el respeto a la infancia y en el cuidado a los más pequeños

Esta semana Mimi Villa nos presenta una labor muy especial en la que está trabajando, se trata de un proyecto educativo y de acompañamiento para niños de 0 a 4 años, que se ha dado a conocer como la Tribu de Mimi.

¿En qué filosofía está basado tu proyecto? ¿Cómo surge?

El proyecto de la Tribu de Mimi surgió hace seis años, mientras trabajaba en una escuela Infantil, comencé a interesarme por pedagogías como Montessori, Waldorf o Movimiento libre de Pikler,  y entendí que existían otras formas de acompañar a la infancia que me parecieron interesantes y con las que me sentía identificada.

La Tribu de Mimi es un proyecto educativo basado en el respeto a la infancia y en el cuidado a los más pequeños, creando un entorno de apego seguro en un ambiente tranquilo y familiar, donde los niños y las niñas tienen la posibilidad de recibir atención individualizada, ya que está limitado a un grupo de seis niños. 

La Tribu de Mimi es un recurso de conciliación familiar en el que yo estoy como acompañante de esos niños, tengo formación en Magisterio Pedagogía Terapéutica en pedagogía terapeútica, soy Técnico de Educación Infantil, Experta en Menores, y sigo en continua formación de estas pedagogías que he ido mencionando. 

La iniciativa comenzó con la figura de Madre de Día, ya que en un principio me encontraba en un espacio más pequeño; actualmente me he trasladado a un espacio más amplio con jardín se ha convertido en una Casa Nido. Este tipo de espacios están regulados por ley, la actividad tiene toda documentación necesaria para ejercerse. 

¿Qué actividades se organizan para estos niños?

El espacio se encuentra abierto desde las ocho y media de la mañana a dos y media, los niños pueden ir entrando en el horario que quieran, siempre avisando algún cambio para organizarnos un poco. 

Actividades organizadas con tal no hay, son pedagogías muy libres y abiertas, muy vivenciales. Lo que si llevamos es una rutina, los vamos recibiendo junto a las familias, que a veces se quedan en este espacio, pueden desayunar con ellos,etc.

Durante el día se le van proponiendo actividades a los niños con instrumentos musicales, con puzzles, con marionetas, jugar con masa sensorial; también actividades fuera, en el jardín, jugamos en el arenero, plantando ó regando en el huerto; además salimos al campo, que lo tenemos aquí muy cerca, donde pueden ver animales como caballos o cabras. 

El contacto con la naturaleza es diario, si no es en el jardín, intentamos salir en la medida de lo posible. En función de la estación del año en que nos encontremos, les va apeteciendo más unas cosas que otras. Por ejemplo, cocinan haciendo sus propias brochetas de frutas o zumos, ellos mismo cogen los frutos del naranjo o el limonero, es un proyecto muy vivencial en el que pueden tocar, oler la comida. 

La Tribu de Mimi se desarrolla el mismo periodo que el curso escolar, de Septiembre hasta Julio, si no se completan las plazas en septiembre, y queda alguna libre se podrían incorporar los niños a lo largo del año. 

¿Qué rinconcitos pueden encontrarse los niños?

Como rinconcitos tenemos una mesa de luz, donde los niños pueden experimentar con materiales traslúcidos y una pintura para jugar también con la luz; un teatro de marionetas donde son ellos los que las manejan y crean sus propias historias; mi labor no es la de guiar la actividad sino la de acompañarlos.

Tenemos otro área que recrea la casita con la mesita, el bebé, la cocinita; también una pequeña zona de baño, donde ellos pueden lavarse,  se peinan o se pintan, teniendo así su propia autonomía;  un baúl con disfraces, al que le dan mucho uso; hay una zona con letras, para los niños que están empezando a tener interés por las letras, para que puedan manipularlas y jugar con ellas; unos módulos de madera donde desarrollan el método Pikler; la zona de instrumentos musicales; también puzzles y piezas de construcción. En exteriores, tienen sus macetas, el arenero, y el huertecito. 

¿Qué beneficios puede traer este método sobre la Escuela Infantil tradicional?

Esto no es una Escuela Infantil como tal, sino que es un recurso de conciliación, tratamos que sea un hogar, para que el cambio del hogar  a otro sitio externo no sea tan chocante. 

Los beneficios son que se trata de una atención muy personalizada, se trabaja con pedagogías muy respetuosas, muy centradas en ellos, en su desarrollo cognitivo y físico. 

A menudo tengo personal de apoyo, aunque trabajo muy bien sola con ellos, ya que tiene mucha autonomía. 

En cuanto a educación ¿Cómo se van dando los pasos?

El Método Montessori es todo muy vivencial, por ejemplo se van aprendiendo los colores con las flores del campo, no hay unos objetivos establecidos en función de edad; sino acompañar sus intereses mientras se van desplegando. 

Hay una frase que me encanta que dice “Los árboles no crecen tirándole de las hojas”, y lo extrapolo mucho con los niños, dejar que ellos se desplieguen y ver cómo se espigan es impresionante, porque van más allá de lo que los adultos queremos que aprendan. 

Acompaño desde la calma, la libertad de juego y  movimiento, la presencia, la serenidad y el vínculo. 

Además del proyecto en sí ¿realizas otros talleres o actividades?

Bueno, por un lado se presta el espacio por la tarde para actividades de este ámbito, y a partir de Septiembre se quieren incorporar talleres por las tarde de Yoga Infantil. 

Algo que añadir….

Me gustaría contar que no tenemos un periodo de adaptación como tal, sino que trabajamos con periodo de vinculación, todo el tiempo que el niño necesite. La familia puede entrar en el nido, y acompañar al niño, conocer a los amigos, los hermanos de día. 

Comentar que estoy certificada en un método que se llama “Educa Bonito” en disciplina positiva, presto una ayuda a las familias en su vida con consejos en cuanto a rutinas del  sueño o sobre la alimentación. Se crea mucho vínculo de Tribu entre las familias, ya que es muy importante sentirse parte de algo. 

Por último, añadir que a partir de Septiembre quiero incorporar talleres por la tarde de yoga infantil, grupos de apoyo de crianza y postparto, y grupos de juego.