El Alfar Romano de los Tejares será restaurado y puesto en valor como recurso turístico

La Delegada de Patrimonio Histórico, Mamen Beato, informaba esta mañana sobre el avance de las obras de Alfar Romano de los Tejares de Lucena visitando in situ la evolución de estas.

La finalización de esta primera parte de las obras está prevista para el mes de Febrero de 2021, y las cuales darán como resultado un edificio que protege este yacimiento de la época romana, junto con dos salas expositivas que servirán como antesala de este. Unas obras financiadas con los fondos Edusi.

El Ayuntamiento de Lucena ha solicitado una subvención a la Diputación de Córdoba para que un equipo de profesionales en la materia realice las labores de restauración del yacimiento, propiamente dicho, ya que ha estado expuesto a la intemperie y esta cubrición servirá como abrigo para ser restaurado correctamente.

Daniel Botella, arqueólogo municipal,  explicaba que “el proyecto contempla tres aspectos, evitar el deterioro progresivo de los daños y las patologías que el echo de que estos hornos, estas estructuras tan endebles, estructuras efímeras como se dice en arqueología, se degraden más; evitar las filtraciones de agua por problemas de lluvia y canalización de las aguas pluviales; y fundamentalmente eliminar todas las acciones de la biofauna que hay alrededor de un yacimiento que ha estado expuesto al aire libre”. Las obras de restauración se llevarán a cabo cuando se disponga del presupuesto necesario.

El yacimiento Romano de los Tejares, se vislumbra que tiene que ser mucho más amplio puesto que la historia habla de unas grandes producciones de alfarería en la zona, pero que no se encuentra en previsión aún descubrir más partes del yacimiento, ya que se necesita de un presupuesto suficiente para preservarlos hasta su restauración.

La explotación turística del yacimiento contendrá una sala expositiva con piezas y vitrinas sobre el mundo romano a su paso por Lucena, otra sala expositiva en la que podrán encontrar unas maquetas con las que podrán manipular tanto niños como personas con discapacidad elementos de construcción de los hornos, y por último un acceso a una pasarela para ver los alfares romanos restaurados, así como una recreación audiovisual de su uso.