Entrevistamos a Luis Gómez, inventor para la empresa SuitCase Computer Entrevistamos a Luis Gómez, inventor para la empresa SuitCase Computer
  Reciéntemente la Starup lucentina SuitCase Computer lanzaba un producto tecnológico sin precedentes ante los lucentinos y lucentinas, del equipo que comforma esta empresa... Entrevistamos a Luis Gómez, inventor para la empresa SuitCase Computer

 

Reciéntemente la Starup lucentina SuitCase Computer lanzaba un producto tecnológico sin precedentes ante los lucentinos y lucentinas, del equipo que comforma esta empresa hemos querido entrevistar a Luis Gómez que ha trabajado en la invención de varios proyectos y su gérmen inventor.

 

¿Qué te ha inspirado para trabajar en un invento, y desde cuándo te viene el germen inventor?

Fue una pregunta que me hice hace unos 4 años. Por aquel entonces me encontraba trabajando en las Bodegas Torres Burgos. Aun tratándose de un trabajo estable y en el que ya contaba con bastante experiencia, un día al acabar la jornada laboral me reservé una cita a solas conmigo mismo y me dije:

Ahora, si volvieras atrás, ¿qué es lo que más te gustaría hacer a nivel profesional?

Y me di cuenta que me habría encantado ser desarrollador de productos y servicios innovadores al servicio de la humanidad. Eso me llenaba al cien por cien de energía y emoción.

 

¿El inventor nace o se hace?

Hablando desde mi experiencia, un poco de las 2 cosas. Desde muy pequeño, siempre tuve alma de inventor. Si me regalaban algo tenía los segundos contados. No me imaginaba cómo  una radio por ejemplo podía hablar. Así que la desmontaba y, si aún no conocía el destornillador, pues la estrellaba para ver qué había dentro. Y siempre  eran las mismas cosas, esa placa verde llena de lentejas, tubos y dibujos de líneas con puntos metálicos (circuito electrónico). Un día mis padres tuvieron la inteligente idea de regalarme el mecano, un juguete de piezas y tornillos  donde tú te hacías tus propios juguetes motorizados. Fue el mejor juguete que me pudieran regalar y el que más conservé.

Ya un poco más grande, cuando me aburría hacía algunos inventos para divertirme. Uno de los más macabros fue juntar dos tubos de cartón de papel higiénico y llenarlos con 2 pilas redondas de las gordas para darle peso. Luego cogí el envoltorio de cartón que tenía el paquete de petardos, que era el mismo de un petardo pero gigante. Me partía de risa construyéndolo,  me tiraba los minutos mirándolo y perfeccionándolo.  Finalmente, como mecha empleé un petardo de bengala con forma piramidal. Su función no era explotar, sino que hacía un espectáculo de luz de unos 2 metros de altura. Lo desmonté y era una mecha de unos 25 cm. que coloqué recta coma la mecha de un petardo. A simple vista daba miedo, sino fuera porque yo fui su creador no me atrevería ni a cogerlo.

Un día antes se lo enseñé a un amigo y se quedó alucinado. Le dije que era un regalo de mi tito que trabajaba en la pirotecnia, que ese era el petardo más gordo de adultos y que dentro de 2 días lo íbamos a reventar  al salir del colegio. Todos nos pusimos detrás de un muro y colocamos el petardo tras otro muro que había a unos metros. Cuando encendí la mecha casi todos salieron corriendo. En el muro se quedaron tan sólo 5 amigos agachados con las orejas tapadas y su cara era un poema. Encima, al final me fui a por el petardo, lo cogí con la mano y salí corriendo con él detrás de ellos. Fue muy divertido.

Unos años más tarde, ya pasada la etapa de la infancia, se apagó mi germen inventor. La sociedad me empujo a ser alguien más racional y menos creativo. Es difícil activar el chip inventor e innovador sin pensar. Creo que al sistema no le interesa mucho la gente que no está entretenida en su diversidad de eventos.

Al perseguir mi estilo de vida soñado me tuve que rehacer. Entrenando el cerebro y adquiriendo información de diferentes materias.  

 

¿Es muy difícil patentar y vivir de un invento? ¿Cuál es el proceso?

Siempre hablando desde mi experiencia. Me encantaría decir que sí, que no es muy difícil, pero no sería sincero. Hoy en día, ser inventor y vivir de ello es toda una proeza. El inventor está en peligro de extinción, tan solo entre el  1% y 10 % de los inventos consiguen llegar al mercado, dependiendo del país. Y a esto hay que sumarle muchos más factores que hacen aún más difícil el reto de patentar y ser inventor, como el miedo de los seres que más te aman, el cambio de la seguridad por la incertidumbre, lidiar todos los días con el fracaso, escuchar opiniones y consejos muy fuertes hacia tu ego, la falta de capital en el desierto, la pérdida de confianza de tu alrededor, incluso a veces casi la perdida de la fe en ti mismo. Pero con el tiempo avanzas y van llegando los resultados. Todo empieza a cambiar en ese momento. Ya tienes una piel de una fibra más dura, y llega un día lo bueno y al otro día lo no tan bueno, así que aprendes a equilibrarte. Y lo mejor de todo, antes de empezar el proceso de inventar y patentar algo que describo a continuación,  es aceptar ya el fracaso y desde ahí trabajar como un ganador mientras exista una posibilidad.  

El proceso sería el siguiente:

  • Vamos a buscar un problema que queramos solucionar.
  • Estudiaremos que en el mercado mundial no hay nada ya inventado que sea igual que tu invento, ni un artículo que se haya publicado antes en alguna revista o red social, ni ninguna difusión propia de tu invento en la web, un fallo que a veces se comete. Una vez llegados a este punto con éxito el invento es patentable.
  • Antes de patentar sería ideal coger la idea y estudiar qué rendimiento podría sacar, cuántas personas la querrían comprar, cómo mejorar la idea, cómo producirla a gran escala, cuánto podría costar cada unidad en el mercado. Con todo esto nuestro invento habrá llegado a un punto más maduro y estructurado para patentar.
  • Ahora toca invertir, además de tu tiempo, tu dinero a un nivel mayor. Lo mejor es contratar a un profesional especializado en propiedad intelectual y describirle tu invento, partes, funcionamiento, etc. El agente redactará la patente y solicitará su admisión. Ahora tiene que pasar por varios exámenes y cada examen vale dinero, sin incluir que cada vez que preguntan algo para dicho examen el examinador cuesta dinero. En caso de superarlos todos y en un plazo que puede durar desde  1 año y medio hasta 3 años, se concede la patente. El primer año la patente te costará desde 1800€ a 3000€, a partir de los 12 meses tendrás que realizar en caso de que la quieras proteger en varios países un pago de 3500€ y a los 36 meses desde los 70.000€ a 120.000€. Un riesgo que se corre después de haber pagado, es que puedes no superar un examen y perder la patente.  Teniendo en cuenta que poca gente dispone de 70.000€ para invertir y que si no se paga cualquiera de las tasas la patente se hace de uso libre tienes que tomar una decisión.
  • La decisión a tomar consiste en alquilar tu patente para que la utilicen pagándote a ti por ello, venderla a inversores y empresas, o por último, crear tu propia empresa alrededor de esa patente o invento, llevándolo al mercado y dándolo a conocer  al mundo generando el interés inversores, empresas y clientes. Para mi esta última opción es la mejor, aunque es la más dura.
  • Formar una empresa de algún producto/servicio ya inventado es difícil, el 90% de las empresas mueren antes de cumplir 5 años. Si todo lo leído hasta aquí te parece complejo y arriesgado ahora viene lo mejor. Para formar una empresa de rápida creación de un invento/producto/servicio que no existe en el mercado, vas tener que invertir tiempo, dinero, estar dispuesto a aprender, escuchar consejos, estudiar, incluso volver a creer en dios o en algo. El caso es que no hay tiempo que perder, creas tu plan de negocio, tu logo, tu marca, tu plan financiero, y como ves que tu solo no puedes con todo tienes que encontrar a uno o varios socios, y lo suyo es elegir varios socios con unas características totalmente distintas a ti, así entre  todos ampliáis el mayor rango de habilidades. Por ejemplo, en mi caso tenía para seleccionar varios socios con perfiles distintos, sin embargo encontré a un socio que abarcaba varios perfiles. Eso no es lo normal, pero tuve suerte de encontrar a alguien así.
  • Creas un producto mínimo viable (prototipo). Llegados a este punto es bastante probable que haga falta dinero para continuar.
  • Buscar financiación, llámese banco, préstamos, inversores, capital riesgo, etc. Y claro, conseguir financiación al principio es difícil, pero llega. Una vez la consigues todo es más ágil, puedes pagar a profesionales que hacen grandes trabajos, y obtener una primera versión del prototipo comercial. Llegado a este punto tu invento ve la luz, y empieza a venir gente interesada en él. Muchos de ellos son medios de comunicación, clientes, inversores que quieren entrar en la empresa o directamente comprarla. Si no la vendes en este punto, hay que hacer otra ronda de financiación mayor para producir la fabricación en masa de las primeras tiradas. Una vez llegado aquí, el proceso empresarial sigue, pero estos son los primeros pasos. Una patente te otorga el monopolio de la invención durante 20 años. En estos 20 años tienes que pagar tasas anuales de renovación. También puedes solicitar un modelo de utilidad. Éste a diferencia de la patente te otorga 10 años de protección, pero para proteger tu invento muy fuertemente también debes registrar una marca, e incluso un diseño industrial. Invertir en activos intangibles es difícil y costoso pero su retorno en caso de éxito puede ser espectacular.

 

Háblanos de tus inventos y su funcionalidad:

Ahora mismo, por acuerdos de confidencialidad, sólo puedo hablaros de 2 de los  inventos  patentados realizados para Suitcase Computer, S.l. que los resumiré lo más brevemente posible.

En primer lugar, una central de notificaciones y ruido, destinado a acabar con la contaminación acústica en residencias, edificios, hospitales, comunidades…, que además sirve para llamar fácilmente a bomberos, ambulancias, policía en caso de urgencia. Este sistema además  permite instalar Aplicaciones para el hogar como servicios de compra alimenticia, vigilancia, detector de gas, etc. 

El producto está compuesto por una central y unos nodos conectados, los cuales detectan el nivel de decibelios y advierten haciendo conscientes a los usuarios cuando exceden el nivel permitido mediante una señal acústica. Si el exceso de ruido no cesa por un determinado tiempo se  notifica una incidencia. Al tener 2 incidencias cualquier operario de la comunidad puede notificar la incomodidad desde la central o su Smartphone, e incluso en una tercera incidencia  cualquier operario puede denunciar al reincidente solo pulsando el botón denunciar el cual inicia un proceso automático tramitando todo lo necesario.

 

invento

 

El segundo invento que resumo es el  Proyector Semiholográfico.

Consiste en una base donde colocas el móvil o Tablet y refleja la imagen del dispositivo a una pantalla plástica. Permite visualizar el contenido como un holograma, apreciándose a la vez lo que hay detrás de la imagen. Es un producto muy llamativo para utilizar con fines publicitarios en escaparates y en  entretenimiento.

 

¿Hacia dónde te gustaría enfocar tu trayectoria profesional?

Preferiría seguir inventando, emprendiendo e invirtiendo. Aun así soy consciente del riesgo, de que puede salir bien y de que puede salir mal. En ambos casos creo que sería feliz, pero prefiero que salga bien. Si sale mal me gustaría ser productivo en el puesto que estuviera desarrollando, ahorraría e inventaría un producto y volvería si pudiera con algo nuevo. Me encantan las empresas y no me gusta la gente que va a trabajar sin pasión, haciendo lo mínimo y esperando a final de mes para poner la mano. Lo que más gusta de inventar, emprender e invertir es la generación de prosperidad que se crea en la sociedad. Aunque todavía existan emprendedores de la era de la explotación y sin corazón que generan mala fama,  también existe una nueva oleada de emprendedores con corazón. Creo que tu vida no tiene sentido si no aporta nada a las futuras generaciones, y además no te lo pasas genial por el camino. Hoy día, poca gente es consciente de lo rica que es la mayoría de la población gracias a las contribuciones de las pasadas generaciones. Hace 100 años, ni el millonario más rico del mundo con toda su fortuna podía sacar de su bolsillo una cámara de fotos a color, grabar un video, comunicarse con alguien que viviera en otro país simultáneamente,  darse una ducha de agua caliente con tanta facilidad, tener electricidad en su casa y conducir coches tan espectaculares…

Si me fuera muy bien, me encantaría desarrollar también acciones sin ánimo de lucro, enfocadas al bien social. Desde una posición económicamente fuerte uno puede hacer mucho bien, creando proyectos con un enfoque más próspero.

 

 

¿Tienes algunas ideas nuevas en cartera para seguir creando proyectos? ¿Nos puedes dejar alguna pista?

Puede ser que tenga algunas, jajaja. Ya es como algo innato, como cuando conduces, al principio te pierdes conectando freno, embrague y varias cosas a la vez, pero una vez practicas es algo automático. A veces tengo que parar, me doy cuenta de que inconscientemente voy pensado como podía ser esto o mejorar aquello, incluso me he llegado a levantar a media noche con alguna idea.

En el caso de tener alguna nueva idea en cartera no podría contarla, ya que como explicaba antes eso podría hacer inviable patentarla. Pero haciendo una excepción, voy a dejar una idea  que me gustaría dedicar a la tercera edad, ya que todo lo que somos hoy es gracias a ellos. No puedo describirla en plenitud para no extenderme más, pero la describiré de forma simple para que todos la entendáis.

Resulta que cuando envejecemos perdemos movilidad y reflejos, que a veces desencadenan en caídas al suelo con graves consecuencias: ruptura de cadera, rodillas, heridas grabes en la cara, todo depende de donde se produzca el impacto. Y estas caídas pueden llevar literalmente a un anciano a la silla de ruedas o cama el resto de su vida. Utilizando unos cinturones protectores ultra finos con una tecnología de sensores y aire comprimido, podíamos obtener airbag protectores que se activen en la caída evitando el impacto en zonas como la cintura, rodillas… llegando a reducir la gravedad del impacto al máximo posible.

 

No hay comentarios hasta ahora.

Sea el primero en dejar un comentario a continuación.